siguenos en facebook siguenos en Google+ siguenos en Twitter Canal de youtube Sígueme en Likedin Sígueme en Pinterest sígueme en Instagram

domingo, 30 de mayo de 2010

ALESIA, novela histórica epistolar

Sitio de Alesia 702 a.u.c. (52 a.d.C.)

Mi muy querida Cornelia:

Si desde Avarico te mencionaba el honor y tremendo valor de las mujeres celtas, capaces de jugarse la vida y anteponer la de sus propios hijos por defender la honra de sus esposos; un guerrero celta deshonrado queda relegado socialmente, peor que muerto, su ausencia se celebra con la mas absoluta indiferencia; aquí en Alesia están demostrando con su abnegación y sacrificio que son los combatientes mas peligrosos a los que hemos de hacer frente. Ellas traen al mundo a nuestros futuros enemigos, con ellas, dotadas de una tenacidad a prueba, no puede la coraza ni el filo de la espada. Por fortuna para Roma, para nosotros, sus esposos ignoran tales cualidades lo cual además de frustrante, indigna.

El asedio a Alesia dura ya casi un mes y sin duda tan escasos de provisiones como nosotros; los auxilios que esperan se demoran de forma vergonzante; han optado por expulsar a sus ancianos, mujeres e hijos de la ciudad sin agua ni alimentos.

!Cretinos!, recuerdo el elevado numero de bajas que nos causaron siempre, tan solo las mujeres: en Avarico aportaban a los defensores tal cantidad de flechas, piedras, jabalinas y haces de leña, que en ocasiones impedían su acción. En Gergovia, apedreaban a mis hombres con tal saña que en mas de una ocasión hubieron de recular.

Algunas, las mas jóvenes, las mas afortunadas, han sucumbido pronto. Imagino su aflicción al sentir como la muerte arrebataba la vida del tierno retoño acurrucado entre sus brazos.

Tentado he estado de acogerlas en nuestros campamentos, pocas se han acercado a la empalizada suplicando ser recibidas, incluso como siervas, pero la vida de mis hombres es prioritaria, las vituallas escasean y son para los mios.

Con esos hombres tendré la misma piedad que ellos han tenido con sus mujeres y mayores, ninguna...

Acaba de entrar mi tribuno y la sombría expresión de su rostro me indica que los refuerzos enemigos han llegado.

Querida Cornelia, cuanto te hecho de menos

Cayo Julio

No hay comentarios: